CARMEN AND ZOSA, BOLIVIA

Poco a poco construyeron su casa. Carmen trabajaba como ayudante de albañil junto a su esposo, con quien tuvo dos hijos. Estaban en el proceso de agregar habitaciones para el hermano de Carmen. Carmen montó una tienda de barrio y se sintió completa.

Todo cambió un sábado de febrero de 2011, el día del mega derrumbe en La Paz. Causado por fuertes lluvias prolongadas, fue lo peor que nadie, hasta ese momento, había visto.

En el barrio contiguo, algunas casas ya comenzaban a ser desalojadas. Carmen fue allí y comenzó a ayudar a la gente a rescatar sus pertenencias. Pero al cabo de unas horas, Carmen se dio cuenta de que el desastre iba a ser peor de lo que se pensaba en un principio. Regresó a su casa y descubrió que las casas detrás de la suya ya estaban comenzando a colapsar.

Carmen salía de su casa con sus pertenencias rescatadas cuando las ventanas y puertas comenzaron a romperse. Afuera, se giró para ver que la casa literalmente se partía por la mitad. Una mitad comenzó a moverse en dirección opuesta a la otra mitad.

Diez minutos después, toda la casa se derrumbó. Fue una de las 400 casas destruidas ese día.

Pero para Carmen, la tragedia no terminó ahí. En los años siguientes, después de vivir en un campo de refugiados, su esposo la abandonó. Carmen trató de reconstruir el hogar que tanto anhelaba. Recientemente, sin embargo, su hijo mayor se suicidó, debido a problemas relacionados con su desempeño escolar.

Y, sin embargo, durante las dos semanas que Carmen estuvo con nosotros, aunque como era de esperar dice que a veces no puede contener las lágrimas, siempre fue una presencia radiante y positiva, ayudando a la producción solo porque quería ser útil. Era una mujer tan fuerte, donde la mayoría de nosotros seguramente nos habríamos derrumbado.

Carmen ahora tiene su propia pequeña tienda de comestibles en El Alto, La Paz.

Zosa, un perezoso de tres dedos, tenía unos ocho meses cuando fue fotografiada aquí. La policía la confiscó en un restaurante en diciembre de 2021. Junto con muchos otros animales, la mantuvieron allí para atraer clientes, después de que la compraran cuando era bebé en un mercado cercano. Como tantos otros animales, su madre fue asesinada.

Zosa ahora vive en los árboles del bosque en Senda Verde.

Debido a que los perezosos son los mamíferos de movimiento más lento del mundo, estas asombrosas y dulces criaturas encuentran cada vez más muertes terribles. A medida que los incendios provocados por el hombre destruyen cada vez más el Amazonas, los perezosos son demasiado lentos para poder escapar. Y cuando los árboles que habitan en el bosque son talados, los perezosos se estrellan contra los árboles. Muchos otros son atropellados.