Las muy especiales circunstancias en las que nos encontramos, han forzado que él ya muy establecido Festival de PhotoESPAÑA OFF 2020, cambie su formato y pase a ser Online. Si nos acompañáis desde hace tiempo, seguro que recordáis que cada año aprovechamos PhotoESPAÑA OFF 2020 para hacer una exposición física en la Galeria Kreisler en Madrid con alguno de los estupendos fotógrafos con los que trabajamos lo que nos ha hecho hacer preciosas y exitosas exposiciones con obras de Miguel Vallinas y Jesús Chamizo.

Este año, teníamos todo preparado para que estos días pudiéramos hacer la inauguración de la exposición de Aida Pascual, pero no va a ser posible hacerla de forma analógica, lo que no impide que la realicemos de forma digital, así que estamos encantados de presentaros las obras que hemos seleccionado de su última serie, Arcadia; un lugar imaginario, creado y descrito por numerosos poetas y artistas, que  hace referencia a un territorio utópico en el que el hombre vive en comunión con la naturaleza. Un modo de vida natural y paradisiaco, no corrompido por la civilización.

Aida, para los que no la conozcáis, es una fotógrafa española, que trabaja siempre en la naturaleza intentando conectar el paisaje con los sentimientos del ser humano, siguiendo los ideales de la pintura y la filosofía romántica. Representando espacios abiertos y sin fronteras, con seres humanos en su real insignificancia, como fuente de inspiración para sus imágenes.

Las fotografías de Aida nos trasladan a lugares místicos en los que los seres humanos y la naturaleza existen en  perfecta armonía. Situando a sus personajes en paisajes dramáticos en los que las pequeñas figuras parecen aisladas y solitarias con trajes que recuerdan a tiempos ya olvidados y en las que no podemos ver sus caras.

Una de las cosas que me llamaros la atención de las obras de Aida es que en ellas cada imagen cuenta su propia historia, aunque está abierta a la interpretación personal, lo que nos permite hacer tantas lecturas de su obra como espectadores tiene. Aida, con estas fotografías no pretende mostrar simplemente una naturaleza bella dirigida hacia lo decorativo ni lo convencionalmente placentero, sino producir calma y recogimiento. Una sensación de tiempo detenido, de exilio voluntario. Una huida del estrés y la vorágine actuales para sumir al espectador en un estado de calma y reflexión.

Estamos convencidos de que las obras de Aida os van a gustar mucho y os harán una gran compañía trasladándoos a mundos fantásticos e imaginarios. Os animamos a observarlas con detenimiento e imaginación, seguro que sacáis vuestra propia historia. Si queréis ver alguna de sus obras en persona y estas en Madrid no dejes de pasar por la Galeria Kreisler en Hermosilla 8. Os esperamos, en la red o en la galería.

Tamara Kreisler
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