Todos sabemos que hay ciertas citas ineludibles en el mundo del arte: la inauguración de ciertas exposiciones, grandes subastas,… pero, sobre todo, las ferias tienen el poder de congregar a las figuras más destacadas del mundo del arte. Algunos para ver, otros para comprar arte y otros para dejarse ver. Desde fuera parece un fenómeno, pero desde dentro hay muchas formas de verlo y vivirlo.

A lo largo de este año 2017 hemos tenido la oportunidad de ver varias ferias que han llamado la atención: los días 8 – 12 de febrero encontrábamos Zona MACO, una interesante feria mexicana; ARCOMadrid llega los días 22 – 26 de febrero; Art BASEL Hong Kong los días 21 – 25 de marzo; Art Brussels del 21 al 23 de abril; Frieze New York entre el 5 y el 7 de mayo; ARCOLisboa 18 – 21 de mayo; Art BASEL del 12 al 18 de junio; y después de un pequeño parón veraniego, Frieze London del 5 al 8 de octubre; FIAC del 19 al 22 de octubre; y por último Art BASEL Miami del 7 al 10 de diciembre.

De todas estas ferias, sin duda a nivel español nos decantamos por ARCOMadrid, enclavada en la semana del arte madrileña y que trae de cabeza a todos los profesionales del sector: ARCOmadrid no es solo una feria de venta de arte. ARCOmadrid es mucho más. Cuando visitas la feria por vez primera, encuentras multitud de personas hablando, debatiendo, disfrutando. Es cierto que las galerías no respiran, no se detienen. Sus representantes no cesan en su labor: hablar, dar tarjetas, informar, explicar. El asunto está más que claro.

En cuestión de números, está claro que ARCOMadrid salió rentable: fue la mejor de los últimos siete años, según palabras de Carlos Urroz, saldándose con más de un millón de euros de ventas en compras de arte este año, y en según Clare McAndrew, estas ventas marcan el 60% de las que se harán durante el año. Habrá que analizar en pocos meses…

Dentro del paradigma de Madrid y su ARCO, encontramos otras pequeñas muestras que no quedan atrás. Ni mucho menos. Tenemos ArtMadrid, dentro del Ayuntamiento de la ciudad, JustMad en Chueca, Hybrid (Santa Bárbara), Drawing Room (C/Velázquez, 12),… y otras tantas, al igual que las fiestas nocturnas que corren por la capital dedicadas a estos profesionales del arte y la cultura. De todas ellas, quizá la que más llamativa y especial resulte es Hybrid: localizada en uno de los centros neurálgicos de cerveceo madrileño, muestra una serie de artistas que se presentan como un arte emergente real en las habitaciones de un hotel.

Definitivamente, las ferias de arte son un momento estupendo para viajar y conocer lugares nuevos, puesto que el clima que se genera en la ciudad anfitriona es especial, mágico y único para los amantes del arte.

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